LUNES DE 20 A 22 hs
www.ciclopradio.com.ar

9º Programa - Elementos

Los elementos arquetípicos clásicos se usaban para explican los patrones de la naturaleza, referidos al estado de la materia (sólido/tierra, liquido/agua, gas/aire, plasma/fuego) o a sus fases. La idea (griegos) o aquello más alla de lo material (japoneses, hindúes) eran, en las culturas antiguas, un ambiguo e indefinido quinto elemento. Sin embargo, en China una serie de elementos ligeramente diferentes llamados Fuego, Tierra, Agua, Metal y Madera, eran entendidos como diferentes tipos de energía en un estado de constante interacción y flujo entre unos y otros, a diferencia de la noción occidental que se refiere a los diferentes tipos de materiales.
Grecia
Fuego, Tierra, Aire y Agua representan en la filosofía, ciencia y medicina griega la comprensión del cosmos donde todo lo existente convive. Algunas creencias incluían un quinto elemento:, el "Éter" o "Quintaescencia." Los filósofos Pitagóricos añadieron la "idea" como quinto elemento, e incluso utilizaban las letras iniciales de estos cinco elementos para nombrar los ángulos de su pentagrama. Por su parte, Aristóteles utilizó el término quintaescencia, razonando que la Tierra, el Fuego, el Aire, y el Agua eran terrenales y corruptibles, y ya que no había ocurrido nada así en terrenos celestiales. En las creencias griegas el éter era una sustancia brillante que respiraban los dioses, en contraste con el pesado aire que respiran los mortales.

China

Las cinco fases o movimientos tienen un carácter dinámico pues es una forma de de clasificar los fenómenos naturales y sus interrelaciones. Esta teoría se aplica a campos tan dispares como la música, la medicina china tradicional, la estrategia militar, las artes marciales o el Feng Shui. Sus elementos son madera (, mù), fuego (, huǒ), tierra (, tǔ), metal (, jīn) y agua (, shǔi). La teoría describe los ciclos de generación, cuando la madera nutre el fuego, el fuego forma tierra "dando lugar a cenizas", la tierra forma la base del metal, el metal se contiene en el agua y el agua hidrata la madera; y, de dominación, cuando la madera retiene la tierra, la tierra contiene el agua, el agua apaga el fuego, el fuego funde el metal y el metal corta la madera.

Sonia Etchart
Colores naturales de despojada abstracción

Bosque Sur, acrílico sobre tela, 100 x 100 cm -2007

Artista argentina, residente en Chile. En sus obras se aprecia con intenso color la naturaleza, como si un último suspiro de aire la hubiera invadido de brillo. Los árboles y forestas se destacan y su recurrencia en los lienzos a veces es total y otras apenas se aparecen. Tallos verdes, marrones, rojos y grises recuerdan la calidez de un atardecer, la noche sombría o el frecor de la mañana.
Desde 1979 a la actualidad su obra ha recorrido las salas de museos y galerías de Perú, Brasil, Argentina, Chile, España, Estados Unidos, Francia, Londres, en expocisiones colectivas e individuales. Su última exposición en Buenos Aires se realizó en Galeria Rubbers. Una tarde de domingo su paso por CicloP-Radio dejó fugas cercanas, recuerdos de la infancia y los secretos de su maravillosa pintura.

"Sonia Etchart: silencios en el paisaje" - El Mercurio (Chile, 2008)

"(...) cuando me vine a Chile sentí que el color de mi pintura cambió. En Argentina era más fuerte. Como que acá se me fue aplacando porque los verdes son diferentes. Mis árboles de acá son los del sur. Ya no tienen que ver mucho con los de la isla. Al venirme encontré otro paisaje que también me encanta. Esas corridas de álamos, arrayanes, ulmos, esos montecitos que hay cuando uno llega al sur, que son palitos y palitos… De la selva exuberante y la humedad, pasé al paisaje del sur de Chile que es súper silencioso."

En tus pinturas de antes, en general era mucho más dominante el verde.
Eso tiene que ver con los silencios del paisaje. Porque mi pintura, a pesar de que todo este tiempo ha ido cambiando y evolucionando, siempre es silenciosa. Los silencios son bonitos, son instancias para la reflexión, en que uno se encuentra con uno mismo y se permite vagar con las imágenes. Son los momentos donde, al menos yo, que no me manejo bien con las palabras, puedo ordenarlas. Estamos como atiborrados de imágenes, ruidos, estupideces, envoltorios...

Blanco (tríptico), acrílico sobre tela, 90 x 90 cm c/u - 2008

¿Qué te hizo avanzar hacia la abstracción?
En un momento me di cuenta de que en mi pintura me estaba moviendo hacia la abstracción, luego volvía a la figuración, hasta que me amigué con las dos. Las dos tenían que ver con mi pintura. Entonces por qué no permitírmelas. Al principio pensaba que había un quiebre, pero luego fue al contrario.

(…) ¿Qué registros guardas de tu infancia que influyeron en tu trabajo?
Mi madre dibujaba súper bien y de joven había hecho cursos de pintura. Cuando éramos chicas jugábamos con su portafolio de puros dibujos a tinta, preciosos. Yo tenía un tío cuyo padre era un artista local, que pintaba las escenografías del teatro municipal de ese lugar, las cúpulas del cine. Siendo niña iba a su taller y siempre había figuras gigantes que él pintaba, el olor al óleo y la trementina, me encantaba entrar a ese lugar, sentía que allí este señor estaba súper protegido con todos estos personajes. Yo le preguntaba qué quería decir todo eso y me decía que cuando fuera grande iba a entender…

Sin título, acrílico sobre tela, 115 x 140 cm -2007

(…) la labor del artista es bastante solitaria. Recuerdo haber tenido peleas en clases porque yo era muy instintiva para el color, entonces al presentar trabajos a veces el profesor decía: “Porque Etchart pensó…” Y yo le discutía: “Yo no pensé”. “¡Cómo que no pensó!” “No, no pensé, es el ojo el que acomodó el color, sin querer”. “No es posible”. “A ver, quién lo hizo…” Terminaba como la rebelde cada vez. Pero hasta hoy estoy convencida de que el ojo acomoda la paleta. Los artistas que lo han logrado, han conseguido su propia imagen, algo muy mágico, como un sello.

¿Cuáles son tus herramientas de aprendizaje, para ayudarte a evolucionar?
Lo emocional, lo que uno vive, los afectos, pérdidas, dolores, encuentros y desencuentros, en el fondo, uno se motiva con la vida. Imagínate que no saliera nunca de acá, que nunca saliera a la calle y me emborrachara. ¡Si no viviera mi pintura sería muerta!

Bosque (díptico), acrílico sobre tela - 190 x 155 cm c/u - 2008

No hay comentarios: